SE ENTREGÓ RÓMULO...

Ya todos lo saben, ya todos lo han visto, ya todos lo han comentado, entonces ¿por qué sumarme al coro? porque como siempre, nuestro país nunca deja de sorprendernos por la tolerancia que demuestra frente al absurdo, frente a la desfachatez, frente a la abierta conchudez para hablar claro, capaz de alcanzar niveles estratosféricos, francamente surrealistas de los principales protagonistas del "faenón". En medio de la locura del tráfico, que llegará a su climax esta semana de APEC, de la depresión colectiva que vive el "pujante" y ultra-peligroso pueblo chalaco por el pase a segunda de Sport Boys (aunque los niveles de nuestro fútbol hacen que la famosa primera parezca quinta, de manera que la rosada bajó a sexta y no a segunda) y el triste final de Así es la vida, llega esta noticia cargada de reacciones alucinantes de los implicados, de los defensores y de algunos periodistas...

Es increíble ver como el abogado Roy Gates (¿no es Bahiano, el cantante de Los Pericos?) se parapeta en las leguleyadas de siempre ("hay que demostraaaar que se instigóooo, hay que demostraaaar si fueee o no fueee el tráaafico de influeeencias real o simulado, ¿acaso hay prueeebas de que Rómulo ha recibiiiido una coooima?...") para mirar de reojo a la prensa, con sonrisita medio de soslayo, sugiriendo que todos nosotros somos poco menos que personas mentally challenged (término anglosajón para denominar a gente, digámoslo con elegancia, con un coeficiente intelectual por debajo del considerado "normal"). También es increíble esa especie de transformación del prófugo hoy entregado por voluntad propia, que pasa de las conversaciones en clave delictiva (por mucho que ahora intenta reducirlas a "estupideces") de "faenones", "aceitadas", "honorarios de éxito", ajos y cebollas a su secretaria y que ahora es una especie de predicador de verbo ordenado, pausado, casi un tv-preacher, un pacifista perseguido que recibe la protección de personas poderosas porque tienen el poder de la moral consigo, una persona capaz de dar la vida por su presidente (y que minuto y medio después dice que se va a arrepentir por haberle dicho "rata").

Hoy, Rómulo León Alegría se anotó el golazo de entregarse después de haber "burlado" a las fuerzas policiales durante 38 días en la clandestinidad, en los cuales jamás salió de Lima mientras los operativos de Hernani le respiraban en la nuca mientras lo buscaban en el norte. Alrededor de su exitoso escondite hay diversas interrogantes que hasta el momento nadie ha tenido oportunidad de hacer: ¿quién lo protegió? (no me refiero a los "valientes compañeros de provincia" que él menciona), ¿Alan García sabía dónde estaba?, ¿encontrará la Fiscalía una copia de la famosa carta que el Presidente repartió a los medios en el CPU de Rómulo? ¿él sabe quién lo "chuponeó"? En fin... es la noticia de la semana, y luego del torbellino de visitas y reuniones que se vienen, seguirá acaparando la atención de propios y extraños, a pesar de que personajes que están aparentemente en las antípodas de esta situación, como el Premier Yehude Simon y la hija de Rómulo, la congresista Luciana León, coincidan en pedir que ahora que ya se entregó "se pase la página".

El Perú es una enorme caja de sorpresas, de manera que cualquier cosa puede pasar...