La música nos libera, sobre todo cuando viene cantada con tanta emoción y sensibilidad. Richie Havens abrió con este lamento que clama por la libertad (la que da la dignidad cuando uno vivie, la que da el más allá cuando uno muere...) el mítico Festival de Música y Artes Woodstock en 1969 y 40 años después, repitió este himno a la libertad del alma en el Festival de Cannes ante un público emocionado... Los años pasan pero la fuerza interpretativa no...
lunes, 23 de mayo de 2011
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