Ahora resulta que la gripe AH1N1 - la consabida "gripe porcina" - se propaga en nuestro país por obra y gracia de decenas de señoritas y señoritos quinceañeros, pertenecientes a ese 25% de familias que no conocen lo que es la palabra "carencias", que consiguen irse de parranda al exclusivo balneario caribeño de Punta Cana, en medio de la crisis mundial del virus que amenaza con convertirse en la primera pandemia del siglo 21, con la bendición y anuencia de sus padres y de los directores de sus colegios.
Catorce de los centros educativos más caros de Lima, que han llegado a ser llamados "de élite" por algún periodista despistado a quien no le ha llegado aún la información de que pertenecer a una élite tiene poco o nada que ver con el poder adquisitivo (como dice una amiga mía, la clase no se compra con tarjeta de crédito), se convierten de un momento a otro en los puntos a partir de los cuales Perú pasó de tener solo 2 casos a 16 confirmados y con la posibilidad de que ya se estén desarrollando cuadros en personas que jamás han salido del país. Y todo ¿por qué? porque esa combinación mortal dinero+ignorancia produce este tipo de problemas sociales.
Nadie aquí está contra los viajes de promoción, aunque es también un abuso que en un país como este, con tantas desigualdades y tareas pendientes, estas(os) escolares abandonen las clases entre bimestres para viajar a República Dominicana cuando hay colegios que utilizan ladrillos como carpetas y hacen sus deberes a la intemperie. Por otro lado tenemos el tema de la seguridad de los adolescentes. Hace 20 años, las niñas y niños bien de este tipo de colegios viajaban al Cusco a fin de año, y aunque estas excursiones promocionales nunca ha sido del todo santas, no es ningún secreto que hoy las cosas están mucho peor que antes en cuanto a lo que pueden llegar a encontrar en estas discotecas y resorts-all-included.
Pero lo que más asombra es la insensatez de los padres de familia y directores de colegio, personas adultas, de buenas situaciones económicas - que como decía al principio, no necesariamente proveen de clase ni de criterio - que una o dos semanas después de la aparición del virus de la gripe porcina, después de haber visto por televisión y por Internet las imágenes de las calles desoladas en México desoladas y las noticias acerca de la suspensión de vuelos, etc., aprueban el viaje pre-promocional a un punto de encuentro de turistas del mundo entero (para llegar a Punta Cana es necesario pasar por Panamá, uno de los países considerados de riesgo por la OMS), exponiendo no solo a sus hijas(os) sino, como podemos ver actualmente, al país a niveles de contagio que antes de su viajecito era absolutamente improbable alcanzar.
Pero la insensatez no queda aquí. No señor. ¿Cuál es la gran solución de estos estadistas que dirigen las exclusivas escuelas involucradas en el contagio masivo? ¿cuáles son las profundas declaraciones de las madres, siempre posando para la cámara, con sus lentecitos oscuros y revoloteando la llave de la 4x4 con el dedo?: Suspensión de clases y actividades, retiro de alumnos, cuarentena para los viajeros y sus hermanos y sus amigos para que no siga creciendo la lista de infectados.
Osea, además de introducir la gripe porcina al Perú, los bieneducados de la ciudad se ven en la necesidad de suspender el proceso de aprendizaje de aquellos que, por sus condiciones, están llamados a ser ese "futuro del país" tan mentado por demagogos y oportunistas de toda laya. Mientras tanto, los adolescentes viajeros disfrutan de más vacaciones, felices y contento contándose por celular sus aventuras en las arenas blancas de Punta Cana. Después de todo, nadie les quitará lo bailado.
Desde esta bitácora hemos expresado nuestras dudas con respecto a qué tan grave puede ser realmente esto del nuevo virus que amenaza a la humanidad y en todo caso, creemos que se trata de una bien pensada maniobra distractiva y que el miedo generado es excesivo, puesto que tomando las medidas necesarias puede controlarse cualquier brote pero esto ya es el colmo... ¿Quién va a sancionar a estos directores y padres por su irresponsabilidad?
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