LA MARCHA FUE UN ÉXITO

Aunque la prensa convencional nuevamente decepcionó y no estuvo a la altura de estas circunstancias, a pesar de haber sido convocada con la debida anticipación, la marcha que los vecinos barranquinos realizaron el martes 29 de junio, denominada "Barranco: Tradición y Modernidad pero con Seguridad" fue seguida por una nutrida concurrencia que acompañó el recorrido en apoyo a Barranco, distrito que ha sido destruido por la prepotencia y la indiferencia de la alcaldía de Lima y su Metropolitano que choca, se atasca y atropella ciclistas.


Como puede apreciarse en estas fotos, la asociación vecinal Salvemos Barranco consiguió convocar a una importante cantidad de vecinos que además, recibieron el apoyo incondicional de otro distrito limeño, separado por una gran distancia pero unido por los mismo problemas: una entusiasta y comprometida delegación de Independencia marchó esa mañana porque están padeciendo también de los mismos problemas: inseguridad vial, desorden, caos vehicular y accidentes que atentan contra la salud de transeúntes y de otros conductores. Quizás esa la prueba más concreta del carácter 100% problemático del Metropolitano: dos distritos de distintas configuraciones urbanísticas, de concentración demográfica absolutamente diferente, pero que se ven afectados en su discurrir normal por el capricho de imponer una obra mal planificada, pésimamente diseñada y oscuramente presupuestada.

Las felicitaciones del caso a los organizadores y a todos los participantes... para cerrar les dejo este divertido video de un capítulo de Los Simpsons que cuenta con la participación especial de Luis Castañeda Lossio. En este fragmento, Castañeda les vende a los distraidos habitantes de la amarilla ciudad de Springfield (tan amarilla como sus escaleras) un mamotreto "genuino, auténtico, eléctrico y rápido" llamado MONORRIEL. Y como es de esperarse, los vecinos aceptan en coro monocorde el ofrecimiento, salvo las voces de unos cuantos que son acalladas por la masa que canta el himno del Monorriel, convencidos y engañados. Cualquier parecido con la realidad no es coincidencia...