UN REGALO PARA EL PÚBLICO PERUANO
Un poco después de las 9 de la noche, Bryan Adams y su banda sorprendieron a medio mundo iniciando el concierto desde un mini-escenario ubicado al centro de la explanada del estadio. Como para acercarse a todos por igual, tocó las primeras canciones desde allí, brindando la oportunidad a aquellas personas que no pudieron acceder a las primeras filas de verlo más de cerca. Uno de los primeros puntos altos del concierto, la balada Please Forgive Me, fue entonada por la multitud que no salía de su asombro. Un grande del rock and roll estaba entre nosotros, tocando canciones que forman parte de la banda sonora de nuestras vidas. De repente las luces se volvieron a apagar y repentinamente, la banda apareció en pleno, ya sobre el escenario principal, con las primeras notas de Can't Stop This Thing We Started, y a partir de ese momento, los éxitos no dejaron de sonar como una necesaria bocanada de aire fresco. Fresco y 100% rockero.
UNA NOCHE PARA RECORDAR
En nuestro medio, el cantautor de la voz alta y rasposa es reconocido por sus temas románticos, que durante años han permanecido en las programaciones de las radios locales más populares y aunque sin duda esos temas fueron los más esperados y ovacionados por el público, la fibra rockera también tuvo su lugar en las casi dos horas que duró el concierto. Así, clásicos de los 80s como Somebody, Summer Of '69, Run To You y de los 90s como The Only Thing That Looks Good On Me Is You, Back To You o 18 'Til I Die resonaron en la noche limeña, con un Bryan Adams impulsado por las buenas vibraciones de una audiencia plenamente enchufada y el apoyo de una banda que lo acompaña prácticamente desde el inicio de su carrera. A pesar de que el sistema de sonido les jugó algunas malas pasadas en ciertos momentos, Keith Scott (guitarras, coros), Norm Fisher (bajo, coros), Gary Breit (teclados) y Mickey Curry (batería) respondieron con una solidez y fuerza impecables.
En su primer contacto con el público peruano, el cantante se disculpó "por haberse tardado tantos años en venir al Perú, pero que esta noche iba a ser una noche para recordar". Así anunció Let's Make A Night To Remember, canción que dio inicio a un set de baladas en el que incluyó las archiconocidas Heaven, Have You Ever Really Loved A Woman? - cuya versión original, perteneciente al soundtrack de la película Don Juan de Marco, cuenta con la participación del guitarrista español Paco De Lucía - y Everything I Do I Do It For You, tema central del film Robin Hood, protagonizado por Kevin Costner. La entrega de los miles de espectadores generaba constantes expresiones de asombro en los músicos, en especial del cantante, que podían apreciarse en las dos pantallas gigantes ubicadas a los lados del escenario.
Como lo viene haciendo desde hace algunos años, Bryan Adams invitó a una señorita del público para que cantara a dúo con él When You're Gone, canción que grabara en 1998 con una de las integrantes de las Spice Girls, Mel C. Tras buscar entre las primeras filas a la candidata, Adams escogió a una adolescente que subió al escenario llevando una bandera del Perú. La niña, emocionada, cantó y bailó como pudo mientras la banda tocaba y el estadio entero la ovacionaba en ese momento que sin duda, quedará en su memoria por mucho tiempo. Al final de la canción, el artista ofreció regalarle unos polos y una vez más, agradeció al público por su calidez y reconocimiento.
ENCORES
Luego de una intensa interpretación de It's Only Love, en la que se lució el guitarrista Keith Scott, la banda - que iba sencillamente vestida de jeans y polos negros - se despidió de Lima ante los aplausos interminables del público. Tras un breve silencio los músicos regresaron para tocar Cloud Number Nine, Run To You y finalmente, Bryan Adams cerró su concierto con dos temas románticos en versión acústica. El primero, Straight From The Heart, una sensible balada que data de 1983, fue cantada por la multitud de principio a fin. Esto terminó de sorprender al canadiense que, sin poder ocultar su emoción, dijo que eso le parecía algo increíble: "Es sorprendente cuán lejos puede llegar la música. Ustedes saben, uno escribe canciones y las saca y alguien las escucha y se crea una conexión... Pero venir aquí a un lugar tan lejano y ver que las conocen y que saben las letras, es simplemente increíble. Muchas gracias". Para terminar, otra clásica de los 90s, All for love, fue igualmente entonada por la audiencia, sellando esa conexión que desde el principio se había establecido entre el artista y su público.
No hay comentarios:
Publicar un comentario