Hace dos días falleció Alekandr I. Solzhenytsin a los 89 años. Este escritor ruso pasará a la historia como uno de los artífices del que quizás sea el testimonio más desgarrador de un sobreviviente a las torturas que el sanguinario gobierno de Joseph Stalin aplicó a quienes consideraba sua adversarios políticos, lo fueran o no, en los años posteriores a la Segunda Guerra Mundial. Nacido en 1918, Solzhenytsin sirvió en el Ejército Rojo durante la guerra pero fue apresado en 1945 por delito de "propaganda anti-soviética".
El escritor, que había estudiado matemáticas en la Universidad del Estado de Rostov y algunos cursos por correspondencia de filosofía, literatura e historia, pasó 11 años de su vida en un campo de concentración en la prisión de Lutbyanka, ubicada en el Archipiélago Gulag, lugar en el que los prisioneros fueron sometidos a las más aberrantes y terribles torturas que se puedan imaginar. Solzhenytsin compiló todas sus experiencias en su monumental obra El Archipiélago Gulag, publicada tras recibir el Premio Nobel de Literatura en 1970, mientras se encontraba en el exilio luego de su liberación en 1956. La obra, que recoge no solo sus testimonios sino también el de 227 prisioneros sobrevivientes a los encierros, constituye uno de lo mayores hitos de la literatura rusa contemporánea. Quienes hayan tenido la suerte de leer El Archipiélago Gulag pueden llegar a comprender el valor de este personaje, al tener que pasar al papel tan horribles recuerdos.
En 1974 fue deportado y se le retiró la nacionalidad rusa. Vivió en Frankfurt, Alemania bajo la protección del cellista ruso Mstislav Rostropovich (fallecido el año pasado), que a su vez era constantemente hostilizado por su apoyo al escritor. Recién en 1990 con los cambios impulsados por Mikhail Gorbachov, Solzhenytsin recibió nuevamente su nacionalidad y se le permitió el ingreso a su país. Durante sus últimos años, Solzhenytsin mantuvo una constante actividad literaria, repartiendo su tiempo entre los escritos de ficción y los análisis filosóficos y políticos, como referente importante del debate de ideas en la nueva Rusia.
Principales obras: Un día en la vida de Ivan Denisovich (1962), Incidente en la Estación Krechetovka (1963), El Archipiélago Gulag (escrita entre 1963 y 1968, publicada en Occidente en 1973 y en Rusia por primera vez en 1990), El primer círculo (1968), Reconstruyendo Rusia (1990), 200 años juntos (su última publicación en el 2003), entre muchas otras.
Lean este excelente artículo que Mario Vargas Llosa publicó sobre Solzhenytsin en la edición de El Comercio del domingo 10 de agosto_
Hola Jorge, leí la nota de Vargas Llosa este domingo, muy buena e interesaante... No sabía mucho de este señor Solzhenytsin, salvo en los noticieros y algunas revistas, pero al informarme bien creo que es un personaje destacado y sobresaliente en un mundo cava vez más dificil y poco justo.
ResponderEliminarHola Henry... sí Solzhenytsin es una de esas personalidades que nos hacen pensar en que es posible superar cualquier clase de adversidad... leí hace años el Archipiélago Gulag y cuando me enteré de su muerte, comencé a releerlo... es toda una experiencia... y el artículo de Vargas Llosa es alucinante... saludosssss...
ResponderEliminarsi, pena que esteamos escuchando el testimonio de un pronazi lo que le quita credibilidad a su obra
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